jueves, 26 de marzo de 2009

FUNDACIÓN GADIR









Tan grande fue la influencia y la importancia de Cádiz en la Antigüedad, que siglos más tarde,
desaparecida ya la Cádiz fenicia, autores griegos y romanos aún hablan de su fundación, del comercio fenicio con todo el Mediterráneo desde Cádiz y de su riqueza humana, económica y metalífera.

Así, conocemos los textos que nos han llegado, por ejemplo de Estrabón (siglo I a.c.) o Plinio (siglo I d.c.), que nos describen la fisonomía de Cádiz, muy distinta a la que conocemos hoy día, entre otras cosas. Estudiando estos textos y contrastándolo con las nuevas tecnologías, sabemos que existieron tres islas:

Erytheia: donde los fenicios desarrollaron su vida urbana. Todo apunta a que fue la Torre Tavira la zona elegida por los fenicios para asentarse, por ser la zona más alta de la ciudad.

• Kotinoussa: llegaría hasta Santi Petri desde la Caleta, donde se ubicó algunos de los templos más importantes de todo el Mediterráneo Occidental, el Templo de Melkart o el de kronion (dedicado a Cronos). Los templos en la Antigüedad, más que una zona de culto, era el lugar donde se desarrollaba el comercio y se realizaban todas las transacciones económicas.

Esto vuelve a ratificar la bonanza económica del Gadir fenicio (aunque esta bonanza no acabará con ellos). Es en esta zona donde se han encontrados numerosos objetos relacionados con el comercio, como estatuillas de dioses, sobre todo de Melkart y de Astarté (dioses fenicios que los indígenas de Cádiz aceptaron oponer resistencia, como el resto de las costumbres traídas por este pueblo), quemadores d perfumes, joyas, etc.

Antípolis, La Isla de San León, actual San Fernando. Esta zona no estaba habitada, al igual que kotinoussa.

Las dos primeras islas, Erytheia y Kotinoussa,
estaría separada por un canal que, empezando en el muelle, recorrería San Juan de Dios y la Catedral, hasta llegar a la Caleta.

Los fenicios extendieron su cultura por todo el sur peninsular, eran grandes comerciantes, orfebres, artesanos y eso repercutió beneficiosamente en la zona, tanto que en el mundo romano se hablará del Laudea Hispaniae, una mítica ciudad, Gadir, llena de oro y riquezas, situada en la Turdetania (valle del Guadalquivir), donde sus habitantes eran muy cultos, civilizados y ricos.

No debemos olvidar la herencia dejada por los fenicios, como el alfabeto. Gracias a ellos la península conoció y empezó a utilizar la escritura.

El declive de Gadir como ciudad fenicia, al igual que el de Tartessos, está poco documentado y lo que se dan hasta el momento son hipótesis.

No hay comentarios:

Publicar un comentario